La Feria de León 2026 se anunció como quien abre un libro antiguo y, con la punta de los dedos, desempolva una historia que está por renovarse. La presentación oficial reveló una inversión de 150 millones de pesos destinada a construir una edición más amplia, generosa y profundamente simbólica. No era un acto rutinario; era el arranque de una celebración que coincide con los 450 años de la fundación de León y con la edición 150 de su feria, dos cifras que, más que números, son capítulos acumulados en la memoria colectiva. La gobernadora Libia Dennise García habló de convertir recursos en experiencias, y su frase resonó como una promesa de transformar lo cotidiano en un momento compartido.

El anuncio del Foro de la Gente terminó de encender el aire del recinto. Foo Fighters, Zoé, Los Ángeles Azules, Enjambre, Kinky, Moenia, DLD y Tiësto encabezarán una lista que mezcla generaciones, estilos y temperamentos. Habrá acceso gratuito, una decisión que conecta con aquella tradición del Teatro del Pueblo donde lo importante no era el tamaño del escenario, sino el encuentro de la comunidad frente a la música. La feria apuesta por un arte que se vive sin barreras, un gesto que vuelve a colocar a León como punto de reunión.

Entre las sorpresas, una eclipsó por un instante al resto: Disney llegará por primera vez a León con el espectáculo “Donde se construyen los sueños”, protagonizado por Mickey, Minnie y Stitch. Es un guiño a la infancia que habita en cada familia, un momento pensado para que niñas y niños descubran que la feria también es una puerta a lo imaginario. La inclusión de este show no sólo amplía la oferta, también imprime un sello de fantasía que marcará la edición.

La gastronomía ocupará su propio territorio sagrado con el Pabellón Guanajuato Sí Sabe. Allí convergerán cocineras y cocineros de las siete regiones turísticas del estado, guardianes de técnicas heredadas y recetas que han resistido el paso del tiempo. Quien cruce este corredor encontrará pan grande de Acámbaro, cajeta de Celaya, vinos del Valle de la Independencia, mezcal de las sierras y la huella del cuero-calzado leonés. Más que un espacio culinario, será un archivo vivo del sabor guanajuatense.

La feria ampliará sus zonas gratuitas y reforzará áreas como el Pabellón de la Identidad, el del Queso y el Vino, la Expo Ganadera y un espacio dedicado a productos elaborados por personas privadas de la libertad. La inauguración, el 9 de enero, será el Día de la Gente, con entrada libre. Este año, además, San Luis Potosí será el estado invitado, llevando consigo su gastronomía, artesanías y expresiones culturales. Durante la presentación, la gobernadora recordó que la feria es un espejo donde León se mira cada año, un lugar donde se reconoce, se celebra y se reencuentra consigo misma.