Tres profesionales reciben premios nacionales por su trayectoria.
El 12 de mayo no es un día cualquiera en el calendario del sector salud. Es la fecha en que se conmemora el legado de Florence Nightingale, pionera de la enfermería moderna, y que sirve para rendir homenaje a millones de profesionales cuya entrega es clave para el bienestar de la población. Así lo expresó el titular de la Secretaría de Salud, David Kershenobich, al encabezar el acto conmemorativo, en el que reconoció la labor incansable de enfermeras y enfermeros en todo el país.
“La enfermería no es solo asistencia médica; es acompañamiento humano, es prevención, es compromiso con la vida”, declaró el funcionario, subrayando que su labor trasciende la atención individual. Desde las consultas de primer nivel hasta los quirófanos, desde las campañas de vacunación hasta la atención en comunidades rurales, el trabajo de enfermería impacta directamente en la salud pública nacional.
La importancia del gremio se hizo aún más evidente durante la pandemia, cuando fueron la primera línea de contacto, y se mantuvieron firmes en medio de la incertidumbre. Kershenobich destacó que su rol ha sido decisivo en reducir la mortalidad infantil, mejorar el acceso a servicios y fomentar hábitos saludables en la población.
Por su parte, Zoé Robledo (IMSS), Martí Batres (ISSSTE) y Alejandro Svarch (IMSS-Bienestar) coincidieron en que la enfermería es mucho más que una función técnica: es un pilar del sistema de salud mexicano. Agradecieron la vocación, la empatía y el profesionalismo con que estos trabajadores sostienen diariamente hospitales, clínicas y centros comunitarios.
El acto también incluyó un emotivo reconocimiento a tres destacadas enfermeras por sus años de servicio y compromiso profesional. Juana Jiménez Sánchez recibió el Premio Graciela Arroyo de Cordero 2025; Yolanda Flores Peña fue galardonada con el Premio María Guadalupe Cerisola Salcido 2025; y Sandra Sonalí Olvera Arreola obtuvo el Premio María Suárez Vázquez 2025. Cada una representa la excelencia, la humanidad y el liderazgo en un ámbito que exige no solo conocimiento, sino fortaleza emocional.
Estos premios simbolizan más que un logro individual: son un reconocimiento colectivo al gremio que sostiene, en silencio muchas veces, el equilibrio de todo el sistema de salud. Las autoridades reiteraron que seguirán impulsando políticas para mejorar sus condiciones laborales, salariales y de capacitación, elementos fundamentales para fortalecer la atención médica en el país.