En un mundo donde el talento joven suele perderse en la maraña de la incertidumbre laboral, la historia de Diego Velázquez emerge como un contrapunto luminoso. Egresado de la carrera de Ingeniería Industrial del Instituto Tecnológico Superior de San Luis Potosí, Diego ha logrado abrirse paso hasta formar parte de General Electrics Aerospace, una de las firmas más importantes del sector aeronáutico. Su actual labor como practicante en el área de Supply Chain, desde Hermosillo, Sonora, es mucho más que una experiencia profesional: es la cristalización de un camino bien trazado.
Este reconocimiento no llegó por azar. Diego es el reflejo de una preparación rigurosa, moldeada en aulas donde se cruzan teoría, práctica y visión de futuro. El Instituto Tecnológico, en voz de sus autoridades, celebró su trayectoria como un símbolo del compromiso formativo que sostiene la institución. Compromiso que, además, se alinea con la directriz del gobernador Ricardo Gallardo Cardona de fortalecer la educación superior como semillero de innovación y movilidad social.
El joven ingeniero no duda en atribuir su logro a la base académica sólida que recibió en su alma mater. Sin embargo, hay un peldaño más en esta historia: su participación en el Summer Camp de Mabe, una plataforma que se ha convertido en semillero de talentos emergentes en el país. Ahí, Diego no solo perfeccionó sus competencias técnicas, sino que adquirió habilidades blandas, adaptabilidad y una nueva visión del trabajo en cadenas de suministro industriales.
La Secretaría de Educación del Gobierno del Estado ha subrayado que este tipo de casos validan el modelo de enseñanza que promueven las instituciones tecnológicas públicas en San Luis Potosí. Un modelo que no se conforma con títulos, sino que apuesta por trayectorias reales, inserción laboral efectiva y una vinculación inteligente con el sector productivo. La meta no es formar empleados, sino profesionales con voz propia en la transformación del entorno.
Casos como el de Diego Velázquez recuerdan que, en ocasiones, el talento sí encuentra su cauce natural cuando se le brindan las condiciones para florecer. En un entorno donde las empresas exigen flexibilidad, resolución de problemas y visión estratégica, él representa a una nueva generación que está lista para responder. Y lo hace con acento potosino, pero con visión internacional.
Como dato curioso, General Electrics Aerospace ha sido una de las compañías que más ha apostado por la innovación en manufactura avanzada y digitalización de procesos en Latinoamérica. La presencia de jóvenes mexicanos en sus filas habla no solo del prestigio de instituciones como el Tec de San Luis, sino del calibre de nuestros profesionistas. Diego no solo está ahí por mérito propio: está también como embajador de una educación que se atreve a mirar al cielo.









