En el Congreso del Estado se llevó a cabo la instalación del nuevo Parlamento de las y los Jóvenes de San Luis Potosí 2025, un ejercicio democrático que abre las puertas del Poder Legislativo a las nuevas generaciones. Bajo el lema “¡Tu voz construye el futuro!”, jóvenes potosinos asumieron el compromiso de representar la diversidad, el pensamiento crítico y la energía transformadora de su generación.
La sesión inaugural estuvo marcada por la toma de protesta de la Directiva, integrada por Sofía Guadalupe Vargas Soriano como presidenta; Saira Tanith Posadas Sánchez, vicepresidenta; Daniela Alejandra Hernández Peña, primera secretaria; Ángela Oliva Ahedo Corona, segunda secretaria; Jorge Patricio Zacarías O., primer prosecretario; y Emiliano Rangel Ortega, segundo prosecretario. Cada uno simboliza la pluralidad de voces que hoy buscan incidir en el presente de San Luis Potosí.
El Parlamento Juvenil no es un acto simbólico: funcionará como un espacio de formación cívica, diálogo y creación de propuestas legislativas que respondan a los retos sociales, educativos, ambientales y culturales del estado. Las y los participantes podrán presentar iniciativas, debatir sobre políticas públicas y aprender el funcionamiento real del Congreso, convirtiéndose en portavoces de las inquietudes y esperanzas de la juventud potosina.
Durante su desarrollo, se observará de manera estricta el principio de paridad de género, garantizando la participación de personas jóvenes de pueblos originarios, de la comunidad LGBTTTIQ+ y con discapacidad, reafirmando que la voz ciudadana se construye desde la inclusión.
A través de este ejercicio, el Congreso del Estado busca fortalecer la educación cívica y promover el liderazgo social, alentando a las juventudes a involucrarse activamente en la vida pública. Cada propuesta debatida en este parlamento podrá convertirse en insumo para futuras políticas y leyes que atiendan las realidades de los jóvenes en San Luis Potosí.
Con la instalación de este Parlamento Juvenil, San Luis Potosí demuestra que la democracia no es un monumento, sino una conversación continua, una invitación a imaginar juntos el futuro desde la palabra, la empatía y la acción.
