La película mexicana No nos moverán, dirigida por Pierre Saint-Martin, ha sido seleccionada para representar a México en los Premios Óscar y Goya 2026, en las categorías de Mejor Película Internacional y Mejor Película Iberoamericana, respectivamente. La decisión fue anunciada por la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas (AMACC), marcando un hito para el cine nacional y la proyección internacional de historias profundamente mexicanas.
Protagonizada por la actriz Luisa Huertas, la cinta ya ha sido reconocida en los Ariel, obteniendo cuatro galardones: Mejor Ópera Prima, Mejor Actriz, Mejor Actor de Reparto para José Alberto Patiño, y Mejor Guion Original, firmado por Saint-Martin e Iker Compean Leroux. Estos reconocimientos anticipan el impacto de la obra en el panorama cinematográfico internacional, consolidando su calidad narrativa y artística.
En blanco y negro, No nos moverán narra la vida de Socorro (Huertas), una abogada desencantada del sistema de justicia mexicano que ha pasado más de cinco décadas buscando al responsable del asesinato de su hermano Jorge, víctima de la masacre de Tlatelolco en 1968. La historia combina rigor histórico con una narrativa íntima, explorando la memoria, la justicia y la resiliencia personal frente a la impunidad.
Saint-Martin se inspiró en la vida de su madre y de su tío para desarrollar el guion, conectando su relato con la historia colectiva de México. La masacre de Tlatelolco, ocurrida el 2 de octubre de 1968, es un episodio marcado por la represión del Ejército y del Batallón Olimpia durante la presidencia de Gustavo Díaz Ordaz, que dejó más de 300 estudiantes muertos. La película se convierte así en un testimonio cinematográfico que rescata la memoria histórica y honra a las víctimas.
La importancia de este reconocimiento trasciende lo artístico: proyectar No nos moverán en escenarios internacionales visibiliza la historia reciente de México, genera conversación sobre justicia y derechos humanos, y permite que las nuevas generaciones comprendan y reflexionen sobre los acontecimientos que moldearon la sociedad mexicana. Además, refuerza el talento nacional y el potencial del cine mexicano como vehículo de expresión cultural y social.
La película seguirá su recorrido internacional con la gala de los Goya el 28 de febrero en Barcelona, y los Premios Óscar el 15 de marzo en Los Ángeles, donde México espera que esta obra se consolide como un símbolo de memoria histórica y creatividad cinematográfica que inspire al mundo.









